“Con 30 minutos al día de deporte es suficiente”

Isasawis vuelve con todo con su nuevo libro Come de todo, entrena conmigo y cambia tu vida (Planeta). Apoyada sobre estos tres pilares, propone dar un giro a la vida de quien esté interesado en ello haciendo especial hincapié en la importancia de cuidar el bienestar emocional, así como la salud mental.

Propone tres patas para el cambio: alimentación, deporte y actitud. ¿Hay alguna que deba predominar?

Diría que las tres, pero si tengo que decir una elegiría la tercera, porque yo creo que si no tienes bien trabajada la parte de actitud, cuidado personal, de quererte, de cómo te relaciones contigo o con los demás… de poco sirve el resto de cosas que hagas. Pero para este cambio que yo he tenido, las tres patas son importantes. Yo creo que no se puede llevar una vida estable y equilibrada si te alimentas fatal. 

¿Cuáles son los patrones menos beneficiosos y que más arraigados están en nuestra sociedad?

Pues el que nos cueste el cambio, en todo, en general, ¿no? Por ejemplo, en la alimentación hace muchos años se pensaba que los huevos subían el colesterol, después se dijo que no y ahora está demostrado que hasta lo bajan… Imagínate el cambio. A día de hoy si publicas una receta que lleva seis huevos, la gente te dice ‘¡ay, madre, el colesterol!’ Y cuesta quitarnos eso que nos dijeron. Por ejemplo, cuando decían que las mujeres para perder peso teníamos que hacer cardio y ahora está más que demostrado que hay que hacer fuerza, pero claro, parece que si no hacemos cardio, si no salimos a correr o a sudar la camiseta no perdemos peso. Las cosas que nos inculcaron desde pequeños cuesta quitárselas. 

Me encanta una frase de Eduardo Galeano que usa al principio del libro: «Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo». ¡Cómo no vamos a poder cambiar entonces nuestra vida!

Totalmente, eso es una cosa que yo me aplico en mi trabajo. Desde mi rinconcito voy haciendo lo que puedo y el mundo, obviamente, no lo puedo cambiar, pero sí puedo cambiar pequeñas cosas en la vida de muchas personas y eso al final es un cambio muy significativo. 

A mí me lo dice la gente, ‘Isa, gracias a ti, llegaste en el momento adecuado para decirme las palabras adecuadas y he hecho este cambio en mi vida’ o han incorporado un nuevo hábito en su vida o se han quitado otro.

¿Por qué cree que nos cuesta tanto conseguir adherencia a una alimentación sana y equilibrada? ¡Lleva años dándonos recetas!

Lo primero, porque normalmente lo que tratamos de conseguir adherencia no es a una alimentación 

sana y equilibrada, porque normalmente lo que hacemos cuando queremos perder peso son dietas y 

eso son cosas que la palabra en sí ya es contraria, no te enseñan nada, son prohibiciones, restricciones en tu alimentación, en tu vida social, que eso no puede ser sostenible ninguna vida y acabamos dejándolo, es muy difícil. Y después, porque las cosas que uno quiere conseguir requieren un esfuerzo. Es más cómodo no esforzarse, eso está claro. Es más cómodo quedarse en el sofá viendo la tele que ir al gimnasio, es más cómodo abrir un paquete de bollería que ponerse a comprar ingredientes y a cocinar… Esto es así, es más fácil el camino más cómodo, pero si vas por ese otro camino menos fácil, lo que descubres es que es mucho más gratificante y sentirte bien contigo 

mismo es una recompensa bastante mayor que la comodidad.

¿Todas las recetas que propone tienen eficacia probada? ¿Las has probado en el laboratorio familiar? ¿Qué opinan ellos?

¡Totalmente! Tengo un laboratorio familiar con dos subalternos que son muy disciplinados, que son mis hijos, y a medida que saco un libro les digo ‘a ver, cariño, que esta receta es para el libro, a ver qué opináis’ y sí, les tengo ahí probando conmigo. Al final soy una sola persona con mi opinión y mis gustos, pero me gusta tener la de los críos, a ellos también les encanta que les de ese papel. Para este libro fue de la misma forma, probaron prácticamente todas las recetas. Todavía Sancho me dice ‘mamá, ¿cuándo vamos a volver a comer la sopa de guisantes y espinacas?’. 

¿Cuál nos aconseja para empezar? ¿Las propone como plato único?

Pues os aconsejo cualquiera de ellas, porque son todas ellas parte de una alimentación saludable, recetas fáciles de hacer con resultados muy ricos, sanos y con ingredientes que tienes en casa. 

A mí me gustan especialmente las sopas y en este libro realmente creo que me han quedado unas sopas riquísimas. Por ejemplo, la de brócoli con queso ahumado o la de berenjena con huevo y tomate.

Respecto a lo del plato único, mira, esto es algo que nunca incluí en mis libros, tampoco lo de para cuántas personas es la receta. No todo el mundo come lo mismo, también depende de que una persona sea más deportista y más activa que otras, ni tú mismo comes la misma cantidad todos los días. Yo soy muy partidaria de una cosa de toda la vida que ahora está de moda y se llama alimentación intuitiva: comer según el hambre que se tenga, esa es la pauta, hay que levantarse de la mesa satisfecho, pero no lleno.

 

Importante, muy importante: come de todo, ¿no? Pero no un poco de hamburguesa, un poco de pizza, un poco de pastel…

A ver, yo digo ‘no todo y no siempre’ o también digo ‘come de todo, pero que sean alimentos’ y no todos son alimentos, porque hay cosas que de alimento tienen poco, como por ejemplo, la bollería industrial, que no tienen minerales, vitaminas, proteínas… que son las cosas que ayudan a nuestro cuerpo a funcionar. Aunque, bueno, aportan otras cosas, como placer. No lo comes siempre, no te alimentas de eso, pero yo lo hago cuando salgo con las amigas a cenar y me tomo una copita de vino o mis tapas o comparto un dulce. 

Claro, por no hablar de lo de tener una rutina de ejercicio diaria… ¿Con 30 minutos al día -o casi todos los días- es suficiente?

Suficiente. Y de eso soy yo la prueba ahora. Yo normalmente hago clases de 40 minutos, pero el viernes hago 20 minutos. Esto es una cosa en la que yo he cambiado el chip hace poco porque antes tenía la sensación de que si no hacía una hora no merecía la pena hacerlo. Y ahora he aprendido a aprovechar hasta los ratitos de 15 minutos que tengo. Pero no solo para el deporte, para todo. Antes si no tenía dos horas para contestar emails parecía que no merecía la pena, pero ahora he descubierto que si aprovechas esos huecos libres en el día al final luego no hace falta darte la paliza. En el deporte es igual, si todos los días puedes sacar 15 minutos ya son 15 + 15 + 15… así multiplicado por siete mira lo que sacas a la semana y ya al mes, ni te cuento.

En este libro da un paso más en la sección Entrena conmigo. ¿Qué esconden los códigos QR?

Pues esconden precisamente eso, que entrenes conmigo. He explicado muchas veces cómo el deporte ha cambiado mi vida y ahora enseño el tipo de deporte que hago. En esos QR entrenas conmigo de la mano de uno de los entrenadores de mi gimnasio, que ha preparado unas rutinas que son el tipo de ejercicios que yo hago, unas más cortas para toda la gente y que se pueden hacer en casa sin ningún tipo de material a otras un poco más largas para cuando tienes más tiempo. Y son para trabajar todo el cuerpo. 

¿Cuáles son sus trucos para ser constante tanto en la alimentación saludable como en el deporte?

¡El truco para ser constante, es ser constante! Te tienes que decir que lo tienes que hacer porque sí y punto, no hay más. Ya hemos dicho que la comodidad es el camino fácil, pero para las cosas que requieren esfuerzo hay que ser disciplinados y tirar de lo que llamamos fuerza voluntad. Cuando suena el despertador a las 6,30 para ir al gimnasio a mí no me apetece nada, pero ¿qué es lo que me motiva a ir? Acordarte de cómo te sientes cuando sales.

En esta ocasión pone también atención sobre la salud mental, esa tercera pata del bienestar.

Es igual de importante y, si me apuras, más, lo que pasa es que yo no lo quiero quitar importancia al deporte y a la nutrición y alimentación, pero el estar a gusto con uno mismo, con cómo uno hace las cosas… es importantísimo para la vida, para todo lo que afrontes, para las metas que te pones, cómo vas a afrontar los problemas que te vayan surgiendo, esas las temporadas que no son tan buenas… 

Para todo es fundamental estar a gusto en tus zapatos, en cómo te tratas a ti mismo, en cómo tratas a los demás… Tener un cierto orden en tu vida, en tener la riendas de tu 

vida, que es lo que explico en esa tercera parte del libro.

Aconseja empezar por el interior. ¿El control de los pensamientos y la presencia en el momento actual pueden ser dos importantes puntos para empezar?

Sí, el libro creo que casi deberíamos empezarlo al revés, por esa tercera parte en la que hablo de cuidar el interior cuidarlos, estar disfrutando del momento en el que estamos y no estar pensando en otra cosa, ser organizado, ponerse metas…

Pero hay situaciones de la vida en las que todo esto parece absolutamente imposible…

En la vida hay situaciones mejores y peores, claro. Yo, como todo el mundo, he pasado épocas muy buenas en mi vida en las que todo parecía ir muy bien y otras en las que parece que te viene todo malo a la vez. Pero precisamente casi te diría que en esas peores situaciones es cuando más debemos tirar de estas cosas, porque cuando todo es fácil no necesitas ese empujón para ser fuerte.

Me gusta la idea que propone del diario de logros. ¿Cómo puede ayudar esto?

Pues yo creo que una cosa muy importante es ver de una forma visual lo que vas consiguiendo porque a veces se te pasa el día y no sabes lo que has hecho, se pasa el día y te acuerdas de lo que no hiciste, pero no te acuerdas de los que sí hiciste. Si tienes una agenda donde vas apuntando lo que vas haciendo, lo que vas consiguiendo… Yo me apunto todo, hasta poner la lavadora, hacer la compra (que no es tanto el diario de logros como el check list que yo me hago), pero cuando termine el día piensas ‘vaya, mira todo lo que he hecho’. Y el diario de logros es ponerte unas metas a lo largo de una semana, por ejemplo, acostarte todos los días media hora antes, poder sacar un rato para leer… Y cuando acabas la semana y miras todo lo que has te sientes orgullo. Me parece una herramienta muy potente.

¿Cuáles son ahora sus principales retos y cómo aplica en ellos lo que nos cuenta en su nuevo libro?

La verdad es que ahora me siento muy bien porque he conseguido muchas cosas y he superado prácticamente todos los miedos que tenía, así como muchas otras dificultades, pero bueno esto que te voy a decir es algo anecdótico. 

A nivel deportivo mi reto ahora mismo es hacer una dominada, el otro día vi hacerlas, me di cuenta que yo nunca había hecho, me puse a hacerlo y no levanté ni medio centímetro. En el profesional estoy muy a gusto ahora mismo, no tengo ningún reto, la verdad es que nunca los he tenido, siempre se me han puesto delante. Y en el personal, mejorar mi inglés, aunque eso es perpetuo.