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Karim Benzema. Marcus Rashford. Zlatan Ibrahimovic. Victor Lindelöf. Jamie Vardy. Bertrand Traoré. Son algunos de los nombres de astros del fútbol que los relatores deportivos mencionan en los partidos de las ligas de fútbol más relevantes del mundo como la English Premier League (EPL) y la Ligue 1 de Francia. Algunos son estrellas destacadas de sus clubes; otros, suplentes con apariciones efímeras en el campo, y otros, deportistas de segunda división. Sin embargo, hay un común denominador que los une y es el consumo del estimulante sueco llamado ‘snus’.
El ‘snus’ es una forma de tabaco de uso oral, utilizado desde hace décadas en países del norte de Europa como Suecia y Noruega para reducir el número de fumadores activos. Es un estimulante oral que consiste en una mezcla húmeda de tabaco picado y pasteurizado con agua, sal y diversos aromatizantes. Se empaca en sobres pequeños como bolsas de té que se venden en latas circulares de aproximadamente 18 sobres. Según fabricantes del producto como Siberia, General y White Fox, cada una de las bolsitas contiene aproximadamente 27,3 mg de nicotina, casi el doble de un cigarrillo común (10 mg).
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Para consumirlas, las bolsitas se acoplan entre la encía y la mejilla o bajo la lengua, y producen “un efecto calmante y placentero” —según alegan quienes lo consumen—.
Los futbolistas lo usan más de lo que la gente cree y algunos incluso juegan con ‘snus’ en la boca durante los partidos
¿Es mejor el ‘snus’ que el cigarrillo? ¿Mejora el rendimiento de los atletas? ¿Es real el efecto calmante? Son algunas de las preguntas que desatan polémica entre los profesionales de la salud alrededor de este estimulante. Para algunos expertos, el ‘snus’ ayuda a mantener el estado de alerta, el poder y la fuerza; no obstante, para otros es más dañino y adictivo que el cigarrillo.
Otro dato no menor respecto de esta droga de origen escandinavo: en 1992 su venta fue prohibida en la mayor parte de Europa, incluido el Reino Unido, luego de que se vinculara su uso con el cáncer. Los expertos creen que el ‘snus’ fue introducido en la liga inglesa por los jugadores nórdicos en la década de los 90. Hoy en día su venta es considerada ilegal en casi todos los países europeos menos en Suecia —donde se sigue fabricando y consumiendo—, pero por más que los profesionales divulguen sus riesgos, su consumo no está prohibido. Al usarlo en medio de los partidos, en las concentraciones o en su vida privada, los atletas no infringen las normas de dopaje.
Lee Johnson —exfutbolista y entrenador actual de Hibernian FC, excoach de equipos como Sunderland, Bristol City y Barnsley FC—, que ha visto sus efectos de cerca, le reveló al sitio The Athletic que, según lo que se observa en los vestuarios, se estima que entre el 35 y el 40 por ciento de los jugadores de la liga inglesa consumen ‘snus’. “Es un tema un poco tabú, nadie habla de eso”, dijo Johnson a la vez que advirtió: “Se está convirtiendo en una cultura. Está empeorando y necesitamos educar a estos muchachos porque es altamente adictivo. No creo que entiendan la verdadera amenaza a largo plazo”.
La preocupación es tal que la Asociación de Futbolistas Profesionales está investigando el caso, no solo por las terribles consecuencias sobre la salud, sino por el impacto en los niños que pueden copiar a sus ídolos.
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Los casos
Algunos atletas fueron vistos en pleno partido haciendo uso de este estimulante. De hecho, recientemente, en medio de un partido entre el Aston Villa y el Arsenal la cámara enfocaba a Unai Emery, el actual entrenador del Aston Villa. No obstante, los ojos de millones de televidentes se situaron en uno de los jugadores que estaba sentado en el banquillo detrás de él: Bertrand Traoré, uno de los suplentes, levantaba el labio superior y colocaba algo en su encía.
Años atrás se generó una controversia cuando Jamie Vardy —atacante del Leicester City— fue fotografiado en plena concentración con el equipo nacional inglés sosteniendo una lata de ‘snus’. Tiempo después y una vez lanzada su autobiografía Jamie Vardy: From Nowhere, My Story, el deportista reveló: “Estaba fumando un cigarrillo en una noche de fiesta en Fleetwood cuando fiché por el Leicester, uno de los muchachos me enseñó el ‘snus’ y descubrí que ayudaba a relajarme”. Y añadió: “los futbolistas lo usan más de lo que la gente cree y algunos incluso juegan con ‘snus’ en la boca durante los partidos”.
Una investigación del Sportsmail de Inglaterra, reveló que el consumo del estimulante se disparó entre los jóvenes deportistas de las academias de los equipos de fútbol ingleses y entre los que juegan en primera división. Asimismo, informaron que en el King Power Stadium del Leicester encontraron restos de ‘snus’ en el banquillo.
Otros casos populares han sido los de Jadon Sancho, Marcus Rashford, Dele Alli y Victor Lindelöf, futbolistas que fueron captados con latas de ‘snus’ o consumiendo los sobres en publicaciones propias y de terceros en redes sociales. Marcus Rashford y Victor Lindelöf fueron captados cargando latas de ‘snus’ en Instagram.
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Es de público conocimiento que la nicotina puede originar graves daños en la salud. Para Santiago Kweitel, médico pediatra, deportólogo y director de la Diplomatura en Medicina Deportiva Pediátrica de la Universidad Favaloro de Buenos Aires, el consumo de estas bolsitas de nicotina sueca puede causar problemas cardiovasculares como el aumento de la presión, arritmias o hipertensión; también problemas de acidez, úlceras e, incluso, se vincula con varios tipos de cáncer: de lengua, esófago, intestino, entre otros. “Hay investigaciones recientes en las que se ha testeado si la nicotina puede ser una herramienta para ‘mejorar el rendimiento deportivo’; sin embargo, los resultados demuestran que no hubo mejorías en el rendimiento de los atletas”, destaca el Dr. Kweitel.
Sus peligrosas consecuencias fueron divulgadas por la Sociedad Americana Contra el Cáncer años atrás. La prestigiosa institución había advertido que las personas que inhalan o mastican tabaco reciben aproximadamente la misma cantidad de nicotina que quienes fuman regularmente. “El tabaco sin humo expone a estas personas a por lo menos 30 productos químicos que causan cáncer.
Las sustancias causantes de cáncer más dañinas en el tabaco sin humo son las nitrosaminas, específicas del tabaco. Los niveles de estos varían según el producto, pero mientras más alto sea el nivel, mayor será el riesgo de cáncer”, informaron. Un estudio publicado en el International Journal of Epidemology investigó la relación entre el uso de ‘snus’ y la mortalidad. Entre las conclusiones, los estudiosos resaltaron que los usuarios actuales y exclusivos de ‘snus’ tenían un mayor riesgo de mortalidad cardiovascular y mortalidad por otras causas en comparación con quienes nunca consumieron tabaco. Finalmente, informaron que los riesgos de mortalidad aumentaban con el consumo sostenido del ‘snus’.
Mirada de profesionales
Tras la divulgación de estos hechos y la creciente preocupación sobre el aumento del consumo del ‘snus’ en jóvenes, la Asociación de Futbolistas Profesionales de Inglaterra (PFA) comunicó que realizará una investigación como parte de una nueva campaña para advertir a los jugadores sobre los riesgos de la ingesta. “Los fanáticos ven a los jugadores como sus ídolos. Miran lo que hacen, lo que visten, lo que comen. Los ven poniendo una, dos, a veces tres de estas bolsitas de ‘snus’ en el labio y naturalmente piensan que ‘está bien, eso es lo que hacen los mejores futbolistas’ ”, declaró Johnson.
En relación con cómo impactan estas novedades en los millones de seguidores de los atletas, el licenciado en psicología deportiva Ezequiel Centeno destaca que “toda acción tiene una repercusión y más si pensamos en un mundo virtual donde la información en cuestión de segundos se puede viralizar”. Para él, es fundamental ser consciente de lo que uno consume para dictaminar qué es lo que está bien o cómo se debe dar el ejemplo. “Si no hay consciencia ni criterio de uno mismo, difícilmente podemos pensar en otros o ponernos en su lugar”, resalta.
¿En quién debería recaer la responsabilidad? ¿En los deportistas o en las instituciones reguladoras? “Creo que no puede caer toda la carga sobre los deportistas. También hay que pensar en las gestiones deportivas, las instituciones y federaciones que son quienes regulan la actividad y competencia deportiva”, señala el licenciado Centeno. Según él, el rol de estas instituciones es esencial, ya que son las que influyen en que los deportistas sufran de estrés debido a los calendarios deportivos superpuestos, viajes constantes, contratos laborales, entre otros factores que agregan presión y malestar a los atletas.
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Se trata de una problemática que pone en el eje de la discusión a deportistas profesionales que tienen un alto impacto en la sociedad y quienes como consecuencia de su estelaridad reciben presión con respecto a su rendimiento, a la influencia que tienen sobre sus admiradores y sobre su futuro. “La ansiedad, la presión, la dificultad de manejar y administrar de manera positiva las emociones, lleva a que estas personas busquen resultados inmediatos. De hecho, si hay algo que nos caracteriza como sociedad es la inmediatez, buscamos soluciones y respuestas rápidas”, enfatiza Julieta Fabi, licenciada en Psicología especializada en consumos problemáticos y en psicología deportiva.
La especialista remarca, al igual que el licenciado Centeno, que los profesionales que rodean a estos atletas tienen la responsabilidad de ayudarlos a administrar mejor sus emociones. “Para esto se trabaja sobre el entrenamiento de la mente, porque esta también entra a la cancha y cuando no se la trata, se desencadenan hechos como estos”, confiesa. Fabi subraya que esto tiene un impacto negativo en los seguidores, especialmente en niños y adolescentes.
Para ella, el hecho de que sea algo ilegal y prohibido hace que el adolescente tenga más ganas de hacerlo ya que “a esa edad se manejan con la curiosidad y lo ilícito” y lamentablemente puede convertirse en un hábito de consumo que aumente a futuro. ¿Riesgos? No solo físicos, explica la licenciada Fabi, sino que se desencadenan problemas en la salud mental porque se torna adictivo. “La adicción secuestra al cerebro y lo esclaviza; entonces solamente piensa en consumir no solo para el rendimiento deportivo, sino en otras áreas de su vida”, advierte.
Abordaje
Todos los profesionales de la salud consultados por La Nación coinciden en que toda situación de consumo problemático es reversible, especialmente con un buen tratamiento y seguimiento. “El más adecuado debería ser el interdisciplinario ya que el impacto de la sustancia en el cuerpo involucra a especialistas de distintas ramas médicas. Abre la puerta a cuestiones como: qué sucede con ese cuerpo, cómo responde al ‘snus’ y cómo se ve afectada la psiquis, entre otras cuestiones”, dice Centeno. Una vez abordado, se encamina la terapia hacia el alcance de un estado de bienestar por parte del afectado.
Respecto a cómo abordar el tema con los admiradores de los futbolistas, Fabi asegura que es importante llevar a cabo una campaña de concientización.
“Como profesional considero que un buen abordaje incluye la prevención, la concientización y la educación en el tema. Se pueden dictar talleres o clases para hacer hincapié en que se trata de una forma antinatural de mejorar el rendimiento deportivo”, indica. Por último, manifiesta que “tanto para la prevención como para el tratamiento de este tipo de problemas, hay que trabajar en el manejo adecuado de las emociones, de la frustración y de los errores”.
VICTORIA VERA ZICCARDI
LA NACIÓN (ARGENTINA) – GDA
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